Colegio de las Américas de León
Filosofía
ENSEÑAR - FORMAR - EDUCAR
VALORES
🤝RESPETO: Educar en el respeto es enseñar a los niños a ser cuidadosos de sus acciones y que no lastimen la dignidad y derechos de los demás. En el Colegio se practican frases de respeto para una convivencia sana: POR FAVOR - GRACIAS - LO SIENTO.
⭐RESPONSABILIDAD: Formar alumnos con la capacidad de prevenir situaciones indeseables, debiendo ser puntual en todos los compromisos. Ser responsable con cualquier obligación.
✋HONESTIDAD: Actuar con rectitud y decir la verdad en todo momento.
💪PERSEVERANCIA: Fijar metas a futuro para poder lograr llegar a ellas.
🏅COMPROMISO: Buscar desarrollo íntegro. No conformarse con el mínimo. Compromiso es vencer todos tus objetivos y sobrepasar tus expectativas.
Misión
Brindar una educación de calidad transmitiendo conocimientos científicos y humanos, fortaleciendo y promoviendo valores morales, sociales y culturales que faciliten la formación integral de los alumnos y les permitan trascender como personas útiles a sí mismos y a la sociedad, cultivando en su ser valores humanos que les permitan ser mejores ciudadanos para tener un mejor México.
Visión
Nos comprometemos a implementar metodologías de aprendizaje basados en el uso de la tecnología de última generación y en la constante innovación pedagógica que permita optimizar la labor educativa de los maestros para desarrollar en sus alumnos un perfil multicompetente que de respuestas a las necesidades y retos de un mundo global cambiante y competitivo.
HISTORIA
En el año 2012, el Colegio de las Américas de Torreón tomó la decisión de expandirse abriendo un nuevo campus en la ciudad de León, Guanajuato. Inicialmente, se pretendía utilizar las claves de incorporación provenientes de nuestro campus en Torreón. Sin embargo, al gestionar los permisos ante la Secretaría de Educación de Guanajuato (SEG), se nos indicó que debíamos iniciar un trámite nuevo, adaptado a los requisitos y normativas específicas del estado.
Enfrentar este proceso no fue tarea fácil. Los obstáculos parecían multiplicarse a cada paso: formularios interminables, requisitos técnicos desconocidos y la necesidad de cumplir con normativas que parecían imposibles de alcanzar. Cada nuevo día traía consigo una lista interminable de desafíos que parecían insuperables. Los proyectos que debían ser presentados eran de una complejidad inesperada, abarcando áreas que no solo incluían la pedagogía, sino también aspectos legales, estructurales, ambientales y arquitectónicos. El peso de la responsabilidad se sentía en cada decisión, en cada reunión, donde el reloj corría y la incertidumbre crecía.
Fueron momentos de tensión y días en los que parecía que cada avance conseguido traía consigo nuevas complicaciones. Pero a pesar de la dificultad, jamás nos dimos por vencidos. Con cada obstáculo, nos arremangábamos y redoblábamos esfuerzos. Las respuestas tardaban en llegar, las reuniones con las autoridades eran exhaustivas, y los plazos se extendían más allá de lo esperado, pero nunca abandonamos nuestra misión. Con cada nuevo reto, nuestra determinación crecía, convencidos de que valía la pena luchar por ofrecer una educación de calidad.
Este proceso de transformación nos permitió evolucionar como institución. Al cumplir con cada uno de los retos impuestos, no solo obtuvimos los permisos necesarios, sino que fortalecimos nuestra infraestructura educativa. Cada desafío que superamos trajo consigo mejoras que impulsaron nuestra calidad académica: los proyectos estructurales permitieron modernizar nuestras instalaciones, brindando un entorno seguro y funcional; las adecuaciones tecnológicas resultaron en aulas equipadas con tecnología de punta; y los proyectos pedagógicos reforzaron un enfoque educativo integral y personalizado.
Y estos logros no fueron obra de la casualidad, sino del trabajo incansable de un equipo comprometido con la excelencia. La pasión y la dedicación de cada miembro del colegio fueron claves para convertir los obstáculos en oportunidades. Cada paso fue dado con la convicción de que estábamos construyendo algo más grande, algo que marcaría la diferencia en la vida de nuestros alumnos. La energía colectiva y el espíritu colaborativo transformaron las dificultades en una fuente de inspiración, contagiando entusiasmo no solo entre el personal, sino también en los estudiantes y sus familias, quienes sintieron la fortaleza de formar parte de una comunidad que siempre avanza.
Gracias a este arduo trabajo, el Colegio de las Américas de León ha sido capaz de posicionarse como un referente en educación de calidad, adaptándose y superando cualquier reto con la firme creencia de que cada esfuerzo contribuye a la formación de una mejor sociedad.
Con más de 30 años de experiencia, el Colegio de las Américas ha demostrado su capacidad de crecer y evolucionar, brindando un servicio educativo integral.
Hoy en día, el "Colegio de las Américas de León, S.C." continúa siendo un referente en la educación de la región, comprometido con el desarrollo académico y personal de sus alumnos, respaldado por un equipo altamente capacitado y entusiasta, que trabaja incansablemente para asegurar un futuro prometedor para cada estudiante.
Nuestro compromiso con la excelencia y la innovación educativa continúa marcando la diferencia, forjando ciudadanos preparados para enfrentar los retos del mundo actual.